Poco tiempo después participó en otro programa en el pueblo de Caguas, donde obtuvo el primer lugar. Su carrera musical comenzó cuando viajó a Nueva York a la edad de diecisiete años. Un año después, a los dieciocho años, Raúl Marrero grabó su primer disco con el trío Los Continentales en el antiguo formato de vinilo de 78 revoluciones por minuto.

Estuvo en Los Ángeles y realizó una gira por México, donde permaneció varios años. Cuando regresó a Nueva York, se consolidó como compositor escribiendo sus propias canciones. Marrero comenzó a actuar en los clubes nocturnos de la Gran Manzana ya aparecer en programas de televisión.

Según su propio testimonio, Don Raúl comenzó haciendo boleros (que era la música de la época), e hizo una cantidad considerable de composiciones en este ritmo. Marrero grabó su primer disco de larga duración con composiciones propias en 1965. Se llamó Sin sangre en las venas, e incluía su primer éxito: la canción Sabrás. A finales de los años sesenta, con el surgimiento y florecimiento de la Salsa, comenzó a componer sus canciones para La Salsa. La orquesta de Charlie Palmieri, con la voz de Vitín Avilés, grabó sus temas La Vecina y La Hija de Lola, que en poco tiempo se convirtieron en éxitos, hoy clásicos. Ismael Rivera cantó el tema Increíble. La orquesta de Tommy Olivencia grabó Primero fui yo, Como lo hacen y Estoy estudiando, con la voz de Frankie Ruiz, Periquito Pin Pin en la voz de Héctor Tricoche y paremos de contar. El mismo Marrero, mostrando su doble talento, ha grabó varios discos entre los que se destacan Apartamento Número Dos, La Casa, Quién Dijo Miedo, Vía New York La Maletica y El Señor de la Salsa.

En su voz sonaron temas como Tributo A Las Mujeres y Como La Quería.